INVESTIGANDO LA NOCHE POR SAINT PIETERS PLAIN

El sábado 21 - 2 no tenia ningún plan, ni nadie con quien salir a tomar algo por ahí, así que me acerqué solo por Saint Pieters Plain, que es una de las zonas de fiesta de Gante, para investigar lo que se cocía por allí.

Dejé mi bici junto a las demás y me di primeramente una vuelta para ver desde fuera que tipo de bares había.

Pachanga..., pachanga... (quizá otro día con compañía me atreviese, pero no solo), pachanga..., pasadizo obscuro y misterioso..., pachanga...., eh! espera un momento! retrocedamos. Eso que suena al fondo del pasadizo es música en directo?. Entremos pues.

Según íva avanzando por el pasadizo, íva teniendo la sensación de estar entrando en una de las películas del Cuervo, en esa en la que hay una discoteca dentro de una iglesia.
El pasadizo iva a dar a un patio donde había gente. No me saquéis de los exteriotipos de punkis, heavis, grunges o hippies porque no se de que banda urbana se trataba esa gente.
Había una escalera metálica que subía al piso superior del que parecía salir la música. Por las escaleras bajaba un hombre con un contrabajo y otro con varias piezas de batería. Esperé a que bajaran y subí por las escaleras.
Abrí la puerta y derrepente me encontré envuelto en medio de un pogo de grind-core. Ya sabeis que tengo bastantes pogos a mis espaldas, pero lo de las patadas giratorias prefiero dejárselo a nuestro amigo Chuck Norris y otros grandes maestros. Así que antes de que me dejaran k.o. , me aparte a la zona tranquila, que por suerte coincidía que era donde estaba la barra. Me pedí una cerveza, y como el resto de melenudos, para no parecer raro, empecé a mover la cabeza de arriba abajo. La peña tirándose del escenario.., bolando latas de cerveza..., BRUTAL. Una cerveza...,otra...

Cuando terminó el concierto intente entrar en otro bar, pero había que pagar entrada y no daban cerveza con ella. Intenté comerles la orejilla a los porteros de que si estaba solo... que si solo me iva a tomar una para ver como era el sitio...(todo en ingles, claro), total, que no coló y pasé de pagar para entrar solo a tomar una.

Ya pensé en irme a casa, pero antes me tome la última de tranqui en un bar irlandés en el que supuestamente se suelen reunir los erasmus, pero en esa ocasion estabamos yo, el camarero y un par mas de perosnas.

Después me fui a casa a tomarme un sandwich y coger fuerzas para acercarme a otra de las zonas de Gante.
Pero me entró la modorra y me quedé dormido en el sofá del salón.